Personal de la Escuela de Tecnología Médica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso se encuentra en Barcelos, Brasil entrenando y capacitando a personal no médico en telemedicina.
La académica, Ariane Lüttecke de la Escuela de Tecnología Médica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), se encuentra en la localidad de Barcelos, Brasil ubicada en el Amazonas, participando en un operativo cuyo objetivo es entrenar y capacitar a personal no médicos para implementar un sistema de telemedicina.
Lüttecke explicó que por la línea del ecuador hay una incidencia muy alta de enfermedades asociadas a la exposición al sol y a la luz ultravioleta, no obstante, para acceder a atención médica especializada la población de Barcelos solo tiene acceso fluvial a las localidades más cercanas. En este sentido, para obtener atención médica las personas deben viajar hasta 12 horas por barco hasta Manaos, el pueblo más cercano donde hay oftalmólogos.
Por ello el equipo de la PUCV liderado por Lüttecke, se encuentra capacitando a personal no médico para impulsar un sistema de telemedicina. “Hay una gran cantidad de pacientes que necesitan cirugía oftalmológica. Tienen hospitales base que son pequeños, pero que cuentan con pabellón que montan para cirugía, por lo que cada cierto tiempo viene un equipo completo y operan a aproximadamente cien personas en dos días”, explicó Lüttecke que realiza sus estudios doctorales en la Universidad Federal de Sao Paulo.
El proyecto busca el entrenamiento de técnicos de enfermería para que realicen triage y definan cuándo una persona necesita cirugía de pterigión o cataratas. Esto se puede realizar a través de telemedicina con el apoyo de imágenes e información y por supuesto la orientación de los médicos en Sao Paulo y Manaos.
El equipo de la PUCV realizó un estudio estadístico para determinar si los pacientes requieren cirugía o entrega de lentes. “Logramos evaluar al 100% de los pacientes necesarios para la validación del personal para presbicia y para el programa de cataratas”.
El proyecto de Lüttecke tiene una duración de dos años y en su primera semana atendió y resolvió cerca de 300 casos de un total de 250 pacientes que recibieron triage. “El proyecto no es sólo para la comunidad en Barcelos, sino para todas las comunidades de la zona”, detalló.
