La terapia digital ofrece una nueva forma de manejar o controlar las condiciones y enfermedades y logra un beneficio general para los especialistas y para los pacientes.
El 2020 cambió en muchos aspectos el panorama de la medicina y la salud, especialmente la atención especializada en servicios de salud digital que logró avances significativos. Hubo avances muy específicos relacionados a terapia en diversas especialidades y enfoques como la Terapia Digital (DTx). La Alianza Terapéutica Digital la definió como productos que “entregan intervenciones terapéuticas basadas en la evidencia a pacientes, que son impulsados por programas de software de alta calidad para prevenir, manejar o tratar un trastorno o enfermedad médica”.
El termino fue acuñado para categorizar evidencia clínica y regular las intervenciones digitales ante la oferta de un gran número de aplicaciones y programas que se auto incluían en el ramo de la salud digital.
Y es que la relevancia médica y científica de la DTx ha crecido a lo largo de la última década, con tecnologías cada vez más sofisticadas y precisas. En Estados Unidos, de enero de 2010 a diciembre de 2019, fueron publicados 557 estudios clínicos que en su título incluyeran la palabra “digital”. De este número 182 correspondieron a intervenciones de prueba de basadas en DTx, de los cuales el 92% fue publicado de 2015 a 2019. Sin embargo, 58 de los 167 corresponden a estudios publicados en 2019, lo que demuestra una tendencia favorable de investigación y aplicación de DTx en los últimos años. La mayoría de las investigaciones clínicas que aplican DTx corresponden a psiquiatría, cardiología y a control de adicciones.
Por otra parte, en abril de 2020, la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos), aprobó en el contexto de la pandemia por COVID-19, una guía sobre los servicios de salud digitales relacionados a tratamientos psiquiátricos. Por otra parte, también la FDA autorizó una terapia digital para tratar el insomnio en adultos, a través de terapia cognitivo-conductual, y un algoritmo personalizado sobre los hábitos de sueño de los pacientes.
Además de la investigación clínica, la inversión en tecnologías de DTx había crecido en una media de 40% los últimos siete años, provocado en parte gracias a las regulaciones y las aprobaciones de las autoridades sanitarias de este tipo de terapias. Además, las DTx cuentan con estudios que respaldan sus resultados en diferentes condiciones o enfermedades, como el trastorno por déficit de atención con hiperactividad, cáncer, asma y esquizofrenia, entre otras.
Según Deloitte los pacientes utilizan aplicaciones móviles de DTx que ofrecen:
- Técnicas para disminuir el insomnio
- Trabajar en conjunto con tratamientos complejos como asma, o cáncer, que
- Técnicas cognitivas para promover cambios en la conducta, conectar wearables para capturar datos y lograr comunicación entre pacientes y médicos.
Especialistas también enfatizan en las diferencias entre los proveedores digitales de salud, y las DTx, dependiendo del público al que va dirigido, y el objetivo que tiene cada una, ambos importantes en el camino de la digitalización en el acceso a los servicios médicos.
El crecimiento actual de este tipo de terapias y de otras tecnologías de salud beneficia no solo la calidad de vida de los pacientes, sino que son un apoyo importante para los profesionales de la salud para facilitar la carga de trabajo y lograr ser más eficaces en su servicio.
MOBIHEALTH NEWS
https://www.mobihealthnews.com/news/look-back-how-tech-changed-pharma-landscape-2020
https://www.mobihealthnews.com/news/physicians-will-decide-fate-digital-therapeutics-industry
EVIDERA
MCKINSEY
STAT NEWS
https://www.statnews.com/2020/02/20/digital-therapeutics-vs-digital-care/
DELOITTE