Iniciativa regional para la eliminación de malaria en Mesoamérica
El paludismo o malaria, es una enfermedad parasitaria que se transmite a las personas por la picadura de mosquitos Anopheles. Esta enfermedad causa inicialmente fiebre, dolor de cabeza y escalofríos, síntomas que pueden ser leves y por ello, difíciles de reconocer como indicativos de malaria. Es una enfermedad debilitante, en algunos casos se presentan cuadros graves caracterizados por anemia severa y hemorragias que, de no ser tratados, puede derivar en complicaciones y hasta causar la muerte. Entre los grupos más vulnerables se encuentran los niños menores de 5 años, las mujeres embarazadas y personas con baja inmunidad. En 2020, casi la mitad de la población mundial estaba expuesta al riesgo de padecer malaria.
La región de Centroamérica es una de las que más ha avanzado en los últimos años en el control de la malaria, por lo que se encuentra en una posición favorable para buscar la eliminación de la enfermedad.
Ante este contexto, en 2018 se forma la Iniciativa Regional para la Eliminación de la Malaria, como una alianza entre Fundación Carlos Slim, Fundación Bill y Melinda Gates y el Fondo Global para la lucha contra el SIDA /VIH, la tuberculosis y la malaria, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y los países de la región centroamericana, la República Dominicana y Colombia, cuyo objetivo es eliminar la malaria de la región en los próximos años.
Esta alianza es una extensión de la exitosa colaboración lograda a través de la Iniciativa Salud Mesoamérica, siguiendo los principios de colaboración entre gobiernos, organizaciones civiles y el BID, bajo el modelo de gestión por resultados.
Para lograr la eliminación, la iniciativa impulsa acciones preventivas y de atención recomendadas por la Organización Mundial de la Salud, como lo son: diagnosticar los casos de malaria en las primeras 48 horas desde el inicio de los síntomas y darles el tratamiento indicado dentro de las primeras 24 horas desde que se confirmó el diagnóstico, con el fin de reducir la transmisión humana. Lo anterior, aunado a la investigación de los casos y aplicación de medidas de control de mosquitos (uso de pabellones, eliminación de criaderos y aplicación racional de insecticidas), esenciales para lograr la meta de eliminación de la enfermedad en cada uno de los países participantes.