Busca que los países que no cuentan con la experiencia e infraestructura tecnológica y digital, puedan desarrollar también una aplicación de rastreo de casos de COVID-19.
La OMS está planeando el lanzamiento de una nueva aplicación sobre COVID-19, que tiene como objetivo brindar información para ayudar a los gobiernos a rastrear casos confirmados y casos sospechosos de COVID-19 en países de menores ingresos.
Se trata de una herramienta de contact tracing, el cual tiene la intención de identificar y evaluar a los usuarios que han estado expuestos a personas enfermas por COVID-19. Esta aplicación para el rastreo de casos funcionará en smartphones a través Bluetooth.
La OMS publicó una guía sobre el contact tracing en el contexto de COVID-19, en la cual detalla los escenarios epidemiológicos posibles y los pasos a seguir para la aplicación de este sistema (https://apps.who.int/iris/bitstream/handle/10665/332049/WHO-2019-nCoV-Contact_Tracing-2020.1-eng.pdf?sequence=1&isAllowed=y).
Según dice el documento, “el contact tracing para COVID-19 requiere identificar a las personas que pueden haber estado expuestas a COVID-19 y seguirlas diariamente durante 14 días desde el último punto de exposición”.
La correcta aplicación de un sistema de contact tracing busca romper las cadenas de transmisión de enfermedades infecciosas, evitando nuevos brotes, en este caso de COVID-19 entre las poblaciones.
A pesar de que Estados Unidos y Europa concentran la mayor parte de los contagios de COVID-19, la OMS tiene especial atención ante posibles botes masivos en África y Asia sudoriental, es por eso que, a pesar de las medidas de los gobiernos, se busca desarrollar y aplicar esta tecnología de rastreo para detener la propagación del SARS-CoV-2, para posteriormente levantar o relajar las medidas de movilidad.