Los ensayos clínicos descentralizados permiten desarrollar nuevos tratamientos efectos a través de investigaciones clínicas más incluyentes y diversas.
Los ensayos clínicos tradicionales suelen incluir poblaciones poco representativas ya que los grupos minoritarios ya sea por limitaciones geográficas, falta de comunicación o incluso discriminación, suelen ser excluidos. Esta es una de las ventajas que tienen los ensayos descentralizados al contar con una visión interseccional e inclusiva. De esta forma se pueden reducir barreras para crear estudios más completos, atraer a más participantes y además reducir costos en investigación.
La principal diferencia entre ensayos tradicionales y descentralizados, es que los primeros requieren que los participantes visiten de manera regular el sitio donde se realiza el estudio y, por otra parte, los descentralizados combinan el uso de software, tecnologías de la información y visitas de los profesionales a la residencia de los participantes.
De igual forma los ensayos clínicos descentralizados implican nuevos retos, como cerrar la brecha digital, estandarizar procedimientos y la necesidad de crear una nueva infraestructura. Es decir, existe una gran diversidad en los desafíos relacionados con la adopción de este tipo de ensayos, no obstante, es para vencer desafíos todavía más grandes en la investigación clínica, como la subrepresentación.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), ha explicado que los ensayos clínicos descentralizados “pueden aliviar la carga de participar en un ensayo clínico y potencialmente mejorar el reclutamiento y la retención de diversos participantes”.
Una de las ventajas de los ensayos descentralizados, es el reclutamiento digital, ya que puede lograr la eliminación de ciertas limitaciones geográficas para los participantes del estudio y además brinda beneficios para los participantes como un manejo de sus tiempos para no interferir con sus actividades habituales.
“Otro elemento común de los enfoques de DCT es el consentimiento informado electrónico (eConsent), una característica que puede estar respaldada por una serie de viñetas de video, que explican el estudio en un formato atractivo”, explica un artículo publicado en npj Digital Medicina. De esta forma los pacientes interactúan con las soluciones de consentimiento electrónico, sin sentirse presionados al leer y comprender documentos largos e impresos que se utilizan en ensayos tradicionales.
Conoce más sobre los retos y oportunidades de los ensayos clínicos descentralizados en el siguiente enlace: https://www.nature.com/articles/s41746-022-00603-y