La respuesta a los desafíos de la salud que están por venir dependerá de una red más estrecha de asociaciones público-privadas y cooperación internacional. Esta es la conclusión a la que llegaron los diversos representantes de las naciones asistentes a la Conferencia Europea ocurrida en Helsinki este mismo año.
“Al reunir a personas de diferentes países y sectores, la academia, las empresas y el gobierno, tenemos una mejor oportunidad de encontrar nuevas soluciones. Trabajando y discutiendo juntos sobre los desafíos y oportunidades relacionados con una mejor salud, estamos avanzando hacia nuevas innovaciones”, dijo Päivi Sillanaukee, secretaria permanente del Ministerio de Asuntos Sociales y Salud de Finlandia.
El país nórdico ha estado recolectando datos desde la década de 1960 sobre salud de la población, así como también datos socioeconómicos, y ahora se dice que tiene registros de salud 100% digitales, según Sillanaukee. Los llamados servicios de Kanta en Finlandia son un buen ejemplo. Kanta es un concepto de servicio único que incluye registros electrónicos de pacientes, recetas, documentos electrónicos de asistencia social y registros personales de salud y bienestar.
Con Kanta, los profesionales de la salud pueden acceder a los datos necesarios en todo el país, almacenar registros de pacientes y hacer recetas. Los ciudadanos pueden navegar por sus propios registros médicos y prescripciones y pedir recetas repetidas en línea. Este es justamente el tipo de iniciativa que se debe dispersar por el mundo, especialmente en países subdesarrollados.
La construcción de buenos servicios de salud digital por sí sola es imposible, una tarea así debe ser respaldada por equipos multitudinarias de diversos países del mundo con el mismo objetivo: mejorar la salud de las personas y prevenir enfermedades desde casa con ayuda de la tecnología.