Dr. Rowland Illing, director de Gobiernos Internacionales para la Salud en Amazon Web Services (AWS), expresó en una charla durante el HIMSS 21, la importancia de la nube en la democratización de la salud.
El Dr. Rowlang Illing tuvo una conversación con Sara Mageit, Editora asociada de HIMSS (Healthcare Information and Management Systems Society) donde abordaron temas sobre Salud Digital, uso de la nube en sistemas de salud, telemedicina y respuestas ante la emergencia por COVID-19 desde un enfoque tecnológico.
Durante la charla, Illing explicó las tareas y retos de AWS durante la pandemia. Y resaltó la importancia de la tecnología en la respuesta ante cualquier crisis de salud. Explicó que la tecnología. “Es la infraestructura principal sobre la que se pueden construir los servicios de salud, proporciona almacenamiento prácticamente ilimitado, capacidad de computación y base de datos que los socios de tecnología de la salud, y los socios de consultoría, y los clientes finales pueden construir soluciones y servicios, para servir a sus pacientes”.
Explicó que esa es una de las misiones de AWS Health, permitir el acceso y la prestación de una atención centrada en el paciente, lo que promueve la digitalización de los servicios. “Nuestra misión es permitir eso y tenemos que proporcionar los servicios adecuados en el lugar y el momento adecuados, con el nivel de seguridad adecuado para prestar la atención”, señaló.
El área de AWS Health que dirige el Dr. Illing, trabaja directamente con los clientes finales, es decir gobiernos, sistemas de salud y centros médicos académicos. En los cuales se encargan de que cuenten con la infraestructura adecuada para llevar a cabo procesos complejos relacionados a los servicios de salud y a la investigación médica.
Por otra parte, explicó, la importancia de las tecnologías en la nube para el desarrollo continuo de los sistemas de salud en el mundo: “La tecnología en la nube puede democratizar el acceso a importantes conjuntos de datos clínicos con controles estrictos, así como la disponibilidad de nuestra avanzada potencia informática”.
Además, también resaltó la importancia de herramientas como aprendizaje automático, que gracias a la nube pueden llegar a más personas. “Pueden estar disponibles en línea, por lo que no es necesario tenerlas en el lugar donde se encuentran y pueden estar disponibles en entornos clínicos seguros, lo que también podría permitir a los pacientes acceder a sus propios datos”.
“Así se democratiza el acceso no sólo a los investigadores y al personal clínico, sino también a los propios pacientes. También significa que los grupos de empresas emergentes (startups) pueden tener el mismo acceso que las grandes corporaciones a una potencia de cálculo y una capacidad de almacenamiento prácticamente ilimitadas, lo que permite el desarrollo sincrónico de muchas aplicaciones en beneficio de los pacientes a partir de conjuntos de datos federados y seguros” concluyó.