Esta iniciativa cuenta con el respaldo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y los países que participan son Chile, Uruguay, Argentina, Paraguay, Colombia y Surinam.
América Latina ha sido una de las regiones del mundo más afectadas por el COVID-19, sin embargo, en países como Chile y Brasil, la política de vacunación avanza progresivamente.
De esta forma, para promover sistemas interoperables en momentos de emergencia como el actual, seis países de la región con el apoyo del BID y la OPS han acordado la implementación de un certificado común de vacunación.
El proyecto estará liderado por el Centro Nacional en Sistemas de Información en Salud (CENS), de Chile, una agencia tecnológica de salud perteneciente a la Universidad de Chile. May Chomali, directora ejecutiva del CENS explicó que el propósito del proyecto es que “ayude a generar competencias locales en estándares y gobernanza de datos que permitan el intercambio de información clínicos asistenciales y la vigilancia de datos epidemiológicos”.
Esta iniciativa se enfocará en tres áreas principales: interoperabilidad e intercambio de registros clínicos asistenciales; interoperabilidad e intercambio de datos para la vigilancia en salud pública; y telesalud transfronteriza.
El proyecto contará con 850 mil dólares de financiamiento por parte del BID y su Programa Estratégico para el Desarrollo de Integración. Jennifer Nelson, especialista en soluciones de salud digitales del BID, expresó lo siguiente sobre esta propuesta y la necesidad de realizar inversiones en momentos críticos como el actual: “Ahora es el momento para hacer las inversiones importantes y responder mejor a esta pandemia y las del futuro. El Covid-19, aunque ha traído mucho dolor, ha relevado aristas importantes para la salud. Sabemos que en el contexto de la vacuna vamos a necesitar sistemas que sigan los estándares internacionales y puedan verdaderamente monitorear, y rastrear toda la información”.