En Estados Unidos, Reino Unido y Canadá, han implementado diversas estrategias para la promoción de la Salud Digital a través de organismos y agencias que impulsan inversiones y colaboraciones para su fortalecimiento.
Estos países son líderes en América y Europa en el uso y adopción de tecnologías de Salud Digital. A través de agencias y organismos de gobierno, así como inversiones privadas, proyectos de Salud Digital se han implementado con éxito.
En Estados Unidos la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, en inglés), creó el año pasado el Centro de Excelencia de Salud Digital (DHCoE, por sus siglas en inglés). El cual tiene como objetivo empoderar a las partes interesadas en proyectos de salud digital proporcionando experiencia científica y asesoramiento tecnológico y de políticas para respaldar los procesos de toma de decisiones.
El DHCoE considera diez criterios que pueden considerarse al momento de determinar si una innovación es válida como solución de Salud Digital: Software como dispositivo médico (SaMD), Analítica avanzada, Inteligencia Artificial, almacenamiento en la nube, seguridad cibernética, interoperabilidad, Sistemas de datos de dispositivos médicos (MDDS, por sus siglas en inglés), Aplicaciones médicas móviles (MMA), Conexión inalámbrica (wifi, bluetooth, NFC), tecnología novedosa aún no aprobada ni presentada ante la FDA.
Por otro lado, en junio de este año el gobierno de Estados Unidos informó la creación de un nuevo programa de salud digital denominado Programa de Desarrollo de la Fuerza Laboral de Tecnología e Informática de Salud Pública (PHIT Workforce Program, en inglés). La inversión inicial será de 80 millones de dólares, para el fortalecimiento de la ciencia de datos en la salud pública. Uno de los objetivos principales es la capacitación de más de 4 mil profesionales en cuatro años, enfocándose en informática y tecnología de salud pública.
En Reino Unido, el Servicio Nacional de Salud, (NHS, por sus siglas en inglés), desde el 2016 creó un programa dedicado a impulsar innovaciones en salud. El NHS Clinical Entrepreneur Programme, ha logrado colaboraciones con importantes compañías internacionales como IBM o Deloitte. Además, ha establecido programas de Salud Digital en diez hospitales en Reino Unido, lo que los ha llevado a conectarse con universidades y hospitales de otros países, entre otras organizaciones.
En los primeros cuatro años del programa, fueron reclutados más de 500 profesionales clínicos y fueron creadas 247 startups relacionadas con ciencias de la salud. Más de 30 millones de pacientes y usuarios se han visto beneficiados hasta el momento.
En Canadá, específicamente en Ontario, fue creada por el gobierno local, el Centre for Digital Evaluation, (CNDHE, por sus siglas en inglés) y otros socios, la Red canadiense para la evaluación de la salud digital. El objetivo de crear una red es evaluar la efectividad “en torno a intervenciones de salud digital sobre el acceso, la calidad y la equidad de la atención”, explica el CNDHE.
La Agencia Canadiense de Medicamentos y Tecnologías en Salud (CADTH, por sus siglas en inglés), explica lo siguiente: “Al mirar hacia la fase de recuperación de la pandemia de COVID-19, sabemos que la atención virtual seguirá desempeñando un papel importante para abordar los tiempos de espera, reducir los costos del sistema de salud y mejorar la experiencia de atención del paciente”, resaltando los beneficios de la modalidad virtual de atención. Sin embargo, consideran que ante la falta de pruebas en el impacto de las intervenciones de salud son necesarias las evaluaciones exhaustivas y clínicamente relevantes.
“Durante los próximos dos años, la CNDHE desarrollará una estrategia para la evaluación de la salud digital en todo Canadá y construirá la infraestructura necesaria para evaluar las importantes inversiones federales y provinciales realizadas en salud digital”, de esta forma los investigadores podrán aprovechar la creación de un marco de evaluación estandarizado, colaborativo y con objetivos en común.
