La Organización Mundial de la Salud (OMS), publicó el 19 de marzo el documento: “Asesoramiento provisional para la elaboración de un certificado de vacunación inteligente”.
El concepto de un certificado digital de vacunación o como los llama la OMS certificado inteligente de vacunación (SVCs, por sus siglas en inglés), busca ser un mecanismo de documentación para que el usuario pueda comprobar que ha recibido una vacuna, en el contexto actual enfocado específicamente a la vacuna anti COVID-19. Este documento debe ser considerado seguro y superior a cualquier certificado físico que pueda ser falsificado u obtenido ilegalmente, además elimina los problemas de lectura de los certificados que se llenan a mano.
La OMS ha desarrollado la versión preliminar de una guía para la creación e implementación de los SVC, que incluye especificaciones técnicas y fue redactado en colaboración con especialistas de un grupo multidisciplinario.
“Un certificado de vacunación es un documento médico que registra un servicio de vacunación que ha recibido una persona. Los certificados o carnés de vacunación digitales hacen referencia a los registros de vacunación digitales a los que puede acceder la persona vacunada, y sirven para los mismos fines que los registros domiciliarios tradicionales: proporcionan una herramienta para garantizar la continuidad de la atención y una prueba de vacunación”, explica la OMS en el documento.
Sin embargo, las SVC consideran dos opciones, una completamente digital que pueda ser consultada en una aplicación y/o en un servidor con alojamiento en la nube, o un “gemelo digital”, es decir una impresión que cuente con un código de barras, que escaneado redirija al documento digital.
Entre los beneficios de implementar este tipo de certificados se encuentran la reducción de fraudes y falsificación de documentos similares, además ofrece seguridad al momento de realizar viajes internacionales, sobre todo en el contexto actual con las restricciones de cada país.
Dentro del documento, la OMS propone los siguientes principios para la creación de un sistema global e interoperable de SVC:
- Equidad: Garantizar que las SVC no fomenten las desigualdades preexistentes ni creen otras nuevas.
- Accesibilidad: Garantizar que las SCV sean accesibles para todos, incluso mediante el uso de normas abiertas.
- Protección de la privacidad: Garantizar el respeto y la protección del derecho a la intimidad de las personas.
- Escalabilidad, flexibilidad y sostenibilidad: Garantizar que las VPC puedan alcanzar una escala mundial, sean sostenibles más allá de la pandemia de COVID-19, sean adaptables a otros contextos y usos, y tengan en cuenta la sostenibilidad medioambiental de las distintas soluciones aplicadas.
Puedes leer el documento completo al hacer clic en el siguiente enlace: https://cdn.who.int/media/docs/default-source/documents/interim-guidance-svc_20210319_final.pdf?sfvrsn=b95db77d_11&download=true
