Europa comienza a experimentar con medicamentos como la cloroquina y la hidroxicloroquina para tratar a pacientes con COVID-19.
En Europa han probado con al menos 3 mil 200 pacientes en Bélgica, Países Bajos, Luxemburgo, Reino Unido, España y Francia. Fue en este último donde se realizaron las primeras pruebas con 800 pacientes durante la tercera semana de marzo.
Las pruebas incluyen medicamentos antivirales usados para tratar el ébola (Remdesivir), el VIH (Lopinavir) y la malaria (Hidroxicloroquina); éste último se usa también para tratar enfermedades como artritis reumatoide y lupus sistémico.
La especialista en enfermedades infecciosas Florence Ader, quien trabaja en un hospital de Lyon, Francia, está liderando los ensayos en su país. Considera que los tratamientos experimentales que no sean eficaces serán abandonados y reemplazados por otros que surjan durante la investigación.
Lo que significa, que, así como estos medicamentos pueden surgir otras alternativas para el tratamiento del COVID-19.
Por el momento las pruebas con hidroxicloroquina han sido exitosas, tal y como se publicó en Journal of Antimicrobial Agents: (https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0924857920300996?via%3Dihub#!), se utilizó en 24 pacientes y mostró una reducción o desaparición del virus en el 75%.
Se trata de una pequeña muestra, sin embargo, los resultados favorables darán entrada a futuras aplicaciones e investigaciones.