Los dispositivos móviles como wearables tienen un gran potencial para revolucionar la atención geriátrica y el monitoreo continuo de los pacientes.
El aumento de la esperanza de vida plantea grandes desafíos, especialmente para los sistemas de salud. Sin embargo, la Salud Digital puede ser una de las respuestas para permitir reducir la presión a los sistemas de salud. Las tecnologías digitales ofrecen un gran potencial para transformar la atención médica tradicional en medicina remota y mejorar la gestión de la salud e independencia en las personas mayores.
Actualmente existen grandes avances de las tecnologías digitales, pero también desafíos y oportunidades a futuro para el aprovechamiento de estas herramientas en la atención médica de adultos mayores. Estas tecnologías incluyen principalmente dispositivos portátiles como wearables para el monitoreo de la salud de los adultos mayores desde su hogar.
Especialistas del Departamento de Nano ingeniería de la Universidad de California, San Diego (UCSD) explican que, la creciente población de adultos mayores y el declive de la fuerza laboral de cuidadores ejercen una presión significativa en los sistemas de salud a nivel mundial en términos de costos operativos y recursos. Por ello el objetivo principal de los sistemas de salud es apoyar el envejecimiento saludable al tiempo que se mantiene la autonomía y seguridad de los adultos mayores en sus hogares.
Los wearables tienen la capacidad de realizar evaluaciones de la salud de los adultos mayores sin necesidad de realizar pruebas de laboratorio o visitas al médico. Las tecnologías tienen la capacidad de que el seguimiento y evaluación de la salud de los pacientes sea constante. Los especialistas indican que las tecnologías médicas tienen el potencial de transformar el cuidado geriátrico.
Los wearables pueden brindar acceso continuo al estado de salud de los adultos mayores, y pueden mejorar el tratamiento de condiciones de salud crónicas o tratamientos en curso sin interrumpir sus actividades diarias. Además, esta clase de dispositivos son capaces de capturar datos biométricos, biomoleculares y no invasivos. Los wearables también pueden generar alarmas para casos de emergencia, como accidentes cerebrovasculares, convulsiones o caídas, facilitando la intervención médica de manera oportuna.
La investigación médica reconoce cuatro categorías principales de este tipo de tecnologías, wearables con sensores físicos, wearables con sensores químicos, plataformas de monitoreo híbridas y multi parámetros y los sensores no vestibles.
Wearables con sensores físicos
La mayoría de los wearables comerciales se basan en sensores físicos que miden señales físicas del cuerpo humano de manera continua y longitudinal durante períodos prolongados. Esto incluye mediciones continuas de signos vitales básicos como frecuencia cardíaca, electrocardiograma (ECG), ritmo respiratorio, temperatura corporal, saturación de oxígeno o presión arterial. Estos sensores físicos también monitorean la movilidad y otras señales relacionadas con la actividad (como pasos) utilizando sensores de movimiento miniaturizados como acelerómetros o giroscopios.
Los sensores físicos hacen esta clase de dispositivos ideales para detectar eventos de caída o evaluar trastornos de la marcha en pacientes con enfermedad de Parkinson o detectar eventos fisiológicos anormales que pueden provocar insuficiencia respiratoria, infecciones o problemas cardíacos.
Wearables con sensores químicos
Los sensores químicos no invasivos capturan datos moleculares del cuerpo humano en tiempo real. De igual manera, ofrecen un seguimiento continuo y no invasivo, pero en este caso de la composición química, de fluidos como sudor, lágrimas, saliva o líquido intersticial.
Asimismo, estos sensores pueden monitorear de manera continua niveles cambiantes de glucosa en pacientes que viven con diabetes, iones de potasio y la hormona del estrés, cortisol en personas con enfermedades cardíacas o la enfermedad de Parkinson. Su utilidad consiste en que ofrecen la posibilidad de monitorear simultáneamente diversos marcadores moleculares y, por lo tanto, pueden proporcionar una mejor imagen diagnóstica del estado de salud de los pacientes.
Plataformas de monitoreo vestibles híbridas y multiparamétricas
Los wearables híbridos, monitorean simultáneamente biomarcadores químicos y signos vitales o variables físicas. Aunque generalmente sensores se utilizan en forma de parches epidérmicos, también hay pulseras elásticas, anillos, relojes inteligentes, calcetines, zapatos, plantilla y lentes. Se tratan de wearbales de nueva generación, que facilitan el monitoreo continuo desde el hogar de pacientes con enfermedades crónicas y detectar y prevenir complicaciones de manera temprana.
Sensores no vestibles
Finalmente, los sensores no vestibles capturan información directamente desde el cuerpo, estos se basan en sistemas inteligentes colocados en el hogar para monitorear el comportamiento, movimiento y postura de los adultos mayores.
Sin embargo, a pesar de las promesas de revolucionar el cuidado geriátrico, la implementación práctica de tecnologías digitales enfrenta desafíos significativos. Estos desafíos abarcan desde limitadas habilidades de alfabetización digital hasta preocupaciones sobre privacidad de datos y amenazas de seguridad, además de limitaciones en el rendimiento de los dispositivos. Aunque algunos de estos desafíos no son únicos de la población geriátrica, otros presentan obstáculos específicos para los adultos mayores.
La alfabetización digital limitada es un desafío importante, ya que muchos adultos mayores pueden tener dificultades para familiarizarse con las nuevas tecnologías y sus aplicaciones. Esto puede dificultar la adopción y el uso útil de los wearables y otras tecnologías portátiles para el monitoreo y el cuidado de la salud de los adultos mayores.
La privacidad de los datos y las amenazas de seguridad también son preocupaciones fundamentales, ya que los adultos mayores pueden ser más vulnerables a fraudes a través de internet y problemas de seguridad. Por ello es necesario garantizar la protección de los datos personales y la información médica es esencial para ganar la confianza de los adultos mayores en el uso de estas tecnologías.
Además, el rendimiento limitado de los dispositivos y la accesibilidad pueden presentar otra clase de obstáculos para los adultos mayores con problemas de visión, audición o destreza manual. El diseño de interfaces intuitivas y accesibles es crucial para asegurar que las tecnologías digitales sean utilizables por toda la población geriátrica.
Finalmente, los especialistas de UCSD han explicado que superar estos desafíos es esencial para lograr una implementación exitosa y generalizada de las tecnologías digitales en la atención geriátrica.
Conoce más en: https://www.nature.com/articles/s41591-023-02391-8
