El Servicio Nacional de Salud de Inglaterra (NHS), se asoció con el Ada Lovelace Institute para reducir los sesgos en la Inteligencia Artificial (IA) en salud
La IA en salud tiene el potencial de transformar la prestación de servicios y la atención médica, a través del desarrollo de algoritmos para la aceleración de investigaciones médicas, para mejorar diagnósticos de enfermedades, o para organizar información médica, entre otros usos y herramientas.
En este sentido, la IA es una herramienta que ayuda a los trabajadores de salud a mejorar la atención, sin embargo, existen algunos sesgos en los algoritmos que han frenado este avance. Como explica el ministro de innovación del Reino Unido, Lord Kamall: “Si bien la IA tiene un gran potencial para transformar los servicios de salud y atención, debemos abordar los sesgos que tienen el potencial de causar más daño a algunas poblaciones como parte de nuestra misión de erradicar las disparidades de salud”.
Ante esta problemática el NHS y Ada Lovelace buscan apoyar a investigadores en la evaluación de algoritmos para evitar sesgos en los sistemas de IA. El objetivo de esta estrategia es abordar la IA en salud de una manera más ética y centrada en los pacientes.
De esta forma los riesgos y sesgos de los sistemas de IA pasarán por diversas verificaciones antes de que puedan acceder a datos del NHS. “Nos aseguramos de crear un sistema de atención médica que funcione para todos, sin importar quién sea o de dónde sea”, explicó Kamall.
El primer paso de esta estrategia es apoyar a investigadores y desarrolladores de sistemas de IA en salud, a involucrar a pacientes y profesionales desde la etapa de desarrollo del proyecto. La NHS espera que estas medidas aumenten la trasparencia del uso de IA en los servicios de salud.
Por su parte, Brhmie Balaram, jefe de Investigación y Ética de IA en el Laboratorio de IA del NHS, explicó lo siguiente: “Generar confianza en el uso de tecnologías de IA para la detección y el diagnóstico es fundamental si el NHS quiere obtener los beneficios de la IA. A través de este piloto, esperamos demostrar el valor de apoyar a los desarrolladores para que interactúen significativamente con los pacientes y los profesionales de la salud mucho antes en el proceso de llevar un sistema de IA al mercado”.
Con este esfuerzo el Laboratorio de IA del NSH busca ser un referente en la evaluación de este tipo de tecnologías para frenar los sesgos en algoritmos que pueden resultar en mayores desigualdades en salud.