Dentro del país andino, las políticas públicas juegan un papel importante para disminuir la brecha de desigualdad hacia los sistemas digitales y así lograr una cobertura total de las necesidades sociales con la finalidad de proteger su calidad de vida mediante tratamientos y operaciones más fáciles de realizar.
Con la incursión de las nuevas tecnologías, el gobierno de Chile se propuso disponer de políticas públicas que respalden las soluciones digitales como metodologías disponibles para los sistemas y servicios de salud.
La Ley de Transformación Digital del Estado, promueve que todos los trámites y servicios se realicen en un formato electrónico y a distancia, con el objetivo de ofrecer resultados en tiempo real y con mayor calidad.
Además, cualquier trámite sería realizado con más accesibilidad y eficacia gracias a las ventajas que las TIC ofrecen en su organización y programación única.
Uno de los efectos colaterales de esta iniciativa repercute en la creación de un Archivo Nacional Digital, el cual, se encargará de organizar y administrar toda la información clínica registradas en los servicios públicos.
Así, las operaciones relacionadas a la Salud Digital como tratamientos, consultas y telemedicina, estarán disponibles desde cualquier dispositivo móvil con sólo descargar la aplicación correspondiente y contar con una red satisfactoria de internet.
El camino a seguir consiste en mantener una interoperabilidad entre todas las instituciones públicas con el afán de que puedan compartir y transferirse la misma información sin ningún obstáculo.
Actualmente, en el país, ya se han digitalizado 1,732 trámites, lo cual equivale al 49.5% del total. La meta del Gobierno es llegar al 80% hacia 2021.